¿Tienes un vuelo pronto? Cuando se trata de tentempiés y recuerdos gastronómicos, a veces puede ser difícil saber qué puedes -y qué no puedes- llevar contigo. Así que, para ayudarte a saber qué es apto para volar y qué está estrictamente prohibido según las directrices de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), hemos elaborado la lista definitiva de alimentos que puedes y no puedes llevar en tu equipaje de mano y facturado.

Haz clic o desplázate por nuestra galería para descubrir los alimentos que puedes y no puedes llevar en un avión, y algunos pueden sorprenderte.

Adaptado al español por María J. Arabia, Editora de sindicación en Español para loveFOOD. Actualizado por Dominique Ayling.

Los siguientes alimentos están todos aprobados por la TSA, por lo que pueden llevarse a bordo de un avión tanto en el equipaje de mano como en el facturado. Sin embargo, si piensas llevarlos contigo a la cabina, ten en cuenta que para cumplir la norma 3-1-1 de la TSA, todas las bebidas y alimentos cremosos o líquidos deben pesar menos de 3,4 onzas (100 gramos) cada uno y caber en una bolsa de un cuarto de galón (un litro). El mejor consejo: si en tu equipaje hay artículos que no son fácilmente reconocibles (harina o especias, por ejemplo), vale la pena etiquetarlos para que el paso por el control de seguridad sea más rápido.

Cuando se trata de llevar leche de fórmula para bebés, puedes guardar cualquier cantidad razonable en el equipaje facturado; sin embargo, si prefieres llevar más de 3,4 onzas (100 gramos) de leche de fórmula en una bolsa de mano, las normas son un poco más complicadas. Aunque en principio no hay problema en viajar con este alimento básico para bebés, será necesario pasar un control especial, así que asegúrate de que esté bien etiquetado y sea fácil de accder en el control de seguridad.

Desde bagels con semillas de sésamo hasta baguettes crujientes, todos los tipos de pan son buenos para acompañarte en tu viaje, ya sea en una bolsa de mano o en tu equipaje facturado. Para evitar que las migas se desparramen por tu maleta de camino a tu destino, asegúrate de envolver cuidadosamente tus productos de panadería antes de subir a tu vuelo.

¿Quieres empaquetar un pastel o una tarta como regalo o dulce recuerdo? La buena noticia es que puedes. Aunque no está claro cuáles son las directrices cuando se trata de tartas con muchos rellenos de fruta blanda, según el sitio web de la TSA, ambas categorías de productos de pastelería pueden llevarse en un vuelo, ya sea bien empaquetados en el equipaje de mano o facturados.

Viajeros golosos, esto es para ustedes: los chocolates duros y los caramelos se pueden llevar perfectamente en avión, tanto en el equipaje de mano como en el facturado, y los chicles también. Para evitar que se derritan o se derramen, asegúrate de que están bien empaquetados; al fin y al cabo, nadie quiere llegar a casa con la maleta llena de ropa cubierta de chocolate.

Las normas son algo más complicadas cuando se trata de queso. ¿Piensas llevar queso duro en tus viajes? No hay problema: puede ir en tu equipaje de mano o facturado. ¿Quieres llevarte queso cremoso? Puedes llevarlo en el equipaje de mano, siempre que pese menos de 3,4 onzas (100 gramos) y esté sellado en una bolsa de un cuarto de galón (un litro); si pesa más, tendrás que facturarlo. Para pasar sin problemas el control de seguridad, asegúrate de envolver bien el queso antes de salir.

Si quieres llevarte de vacaciones tu infusión con cafeína favorita, tenemos buenas noticias: los granos de café, las bolsitas de té y las hojas de té sueltas se consideran "productos secos", por lo que se pueden llevar en el avión. Tú decides si los guardas en el equipaje de mano o en el facturado.

Siempre que no lleves líquidos, estás en tu derecho de llevar comida cocinada en el avión, tanto en el equipaje de mano como en el facturado. Solo tienes que asegurarte de que los alimentos cocinados con los que quieras volar estén bien empaquetados para que la cola pase rápidamente por el control de seguridad.

A diferencia de las frutas y verduras frescas, que pueden ser un poco complicadas (más sobre esto más adelante), la fruta deshidratada es un tentempié certificado apto para volar. Mételos con cuidado y guárdalos en el equipaje facturado, o llévalos en el equipaje de mano para picar durante el viaje.

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Ya hemos dicho que el café en grano y las hojas de té se pueden llevar en avión, pero ¿qué otros productos secos puedes llevar? Cosas como la pasta, los cereales, las especias, las proteínas en polvo y la comida seca para mascotas pueden llevarse en un avión sin problemas, tanto en el equipaje de mano como en el facturado. Si los artículos no son claramente reconocibles, es buena idea etiquetarlos para que los agentes de la TSA sepan de qué se trata.

Aunque los huevos frescos no son el primer alimento que se nos ocurriría meter en el equipaje, en realidad son totalmente aptos para volar (ya sea en una maleta facturada o en una bolsa de mano). Aunque el interior es técnicamente líquido, son lo bastante resistentes como para que la TSA los considere alimentos sólidos. Solo tienes que envolverlos con cuidado para evitar que se rompan durante el vuelo.

Tanto si tu tentempié preferido son las papas fritas, las galletas saladas, los frutos secos, las galletas o las barritas de cereales, te alegrará saber que no está prohibido llevarlos en el equipaje de mano o facturado para un viaje en avión, siempre que estén sellados. Esto es especialmente útil si te espera un vuelo largo y no quieres gastarte dinero en caros tentempiés a bordo.

Una sabrosa noticia: la pizza está aprobada por la TSA, así que tanto si vuelves de Nueva York con una pizza ultra delgada como si vuelves de Motor City con un trozo al estilo de Detroit, puedes llevarla en tu equipaje de mano o facturado. La única pregunta es, ¿cómo envolver la pizza sin estropear los ingredientes?

Afortunadamente, el bocadillo favorito de todo el mundo, el sándwich, también está permitido en los vuelos, tanto si va cuidadosamente empaquetado en la bodega como en una bolsa de mano. Hoagie, sub, o grinder, todos los sándwiches son bienvenidos.

Entonces, ¿qué alimentos no puedes llevar en tu equipaje de mano? En primer lugar, no está permitido llevar bebidas o líquidos (como sopas, aceites y vinagres) que pesen más de 3,4 oz (100 gramos). Del mismo modo, los alimentos no sólidos (como queso blando, mantequilla de maní, salsas, mermeladas y jaleas) que pesen más de 3,4 onzas (100 gramos) están prohibidos. Los alimentos enlatados, las frutas y verduras frescas y la carne y el marisco frescos también están prohibidos en la cabina, pero, afortunadamente, se pueden llevar en el equipaje facturado.

Si quieres viajar con alguno de los siguientes alimentos y bebidas, tendrás que guardarlos cuidadosamente en el equipaje facturado; por desgracia, la TSA no permite actualmente que se lleven en el equipaje de mano. Como alternativa, puedes intentar enviar estos artículos por correo para asegurarte de que llegan a su destino sanos y salvos.

La TSA autoriza el café y las bebidas embotelladas, como el agua, los zumos y los refrescos. Sin embargo, aunque se puede llevar a bordo cualquier cantidad razonable en el equipaje facturado, tendrás que asegurarte de que la bebida que elijas pese menos de 3,4 onzas (100 gramos) si quieres llevarla en cabina, sellada en una bolsa tamaño cuarto de galón (un litro) -y con un volumen tan pequeño permitido, apenas vale la pena. Las bebidas alcohólicas con un 24% de alcohol o menos también pueden llevarse en el equipaje de mano, siempre que también cumplan la norma 3-1-1. También puedes compar bebidas dentro de la terminal una vez pases seguridad pero ten en cuenta que los precios en los aeropuertos pueden ser muy elevados. 

Dado su peso, probablemente sea bueno que los alimentos enlatados solo se puedan llevar en el avión en el equipaje facturado; al fin y al cabo, ¿quién quiere cargar con una pesada maleta de mano por el aeropuerto? La mayoría de las latas pesan más de 3,4 oz (100 gramos), por lo que es poco probable que cumplan la norma 3-1-1 de la TSA, lo que significa que no puedes llevarlas en cabina, aunque quisieras.

En general, no pasa nada por llevar fruta y verdura frescas en un vuelo si las guardas en el equipaje facturado, y de mano (si los productos son blandos, triturados o líquidos, deben cumplir la norma 3-1-1.), siempre y cuando no haya legislaciones locales que lo prohíban, por ejemplo, los pasajeros que vuelan al territorio continental de EE.UU. desde Hawái, Puerto Rico o las Íslas Vírgenes de EE.UU. actualmente no pueden viajar con la mayoría de las frutas y verduras frescas, debido al riesgo de propagación de plagas de plantas invasoras.

¿Vas a coger un vuelo corto y quieres llevar carne fresca o marisco en el equipaje facturado? Según el sitio web de la TSA, puedes; solo asegúrate de que esté bien envuelto en un paquete sellado. Sin embargo, si la comida está empaquetada con hielo o bolsas de hielo, tendrás que asegurarte de que el hielo o las bolsas de hielo están completamente congelados antes de intentar pasarlos por el control.

Hablamos de salsas cremosas y para untar, aceites y vinagres, miel, hummus, helados, mermeladas y jaleas, sirope de arce, mantequilla de maní, sopas, yogures y alimentos para mascotas. Todos ellos se pueden llevar en el equipaje facturado sin problemas, pero si quieres llevarlos en el equipaje de mano, tendrás que asegurarte primero de que pesan menos de 3,4 onzas (100 gramos), y colocarlos en una bolsa resellable de un cuarto de galón (un litro).

Hay algunos alimentos y bebidas que sencillamente no puedes llevar a bordo de un avión, tanto si están en tu equipaje facturado como si no. En primer lugar, no está permitida ninguna bebida que contenga más de un 70% de alcohol, y si piensas llevar bebidas que contengan entre un 24% y un 70% de alcohol, hay un límite de cinco litros por pasajero. Actualmente, los viajeros que vuelan al territorio continental de EE.UU. desde Hawái, las Íslas Vírgenes de EE.UU. o Puerto Rico también tienen prohibido llevar la mayoría de las frutas y verduras frescas, debido al riesgo de propagación de plagas vegetales.

Dependiendo del país al que viajes, pueden aplicarse normas diferentes a la hora de llevar alimentos y bebidas, así que asegúrate de consultar las directrices más recientes. Si viajas a EE.UU. desde otro país, recuerda que tendrás que pasar por la aduana, donde es posible que tus maletas tengan que someterse a un control. Consulta la normativa más reciente de Aduanas y Protección de Fronteras de EE.UU. para ver la lista completa de artículos permitidos.

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