Dicen que comemos con los ojos, y eso es lo que ocurre con esta sabrosa selección de películas y programas de TV. La comida desempeña un papel estelar en la gran y la pequeña pantalla, ya sea como accesorio que ayuda a contar la historia o como parte crucial de la trama. En algunos casos, las apariciones comestibles en la pantalla han mostrado delicias de las que muchos de nosotros nunca habíamos oído hablar. En otros, han impulsado las ventas en la vida real. Desde los trozos de Reese en E.T. y los gofres Eggo en Stranger Things, hasta los espaguetis y la pizza en El Oso, echamos un vistazo a los alimentos que desataron la locura entre los fans de la televisión y el cine.

Haz clic o desplázate por nuestra galería para descubrir los alimentos que se han hecho famosos gracias a sus papeles protagonistas en la pantalla, con una cuenta atrás hasta el mayor éxito de todos ellos.

Adaptado al español por María J. Arabia, Editora de sindicación en Español para loveFOOD. Última actualización por Dominique Ayling.

La película de Disney de 2009 La princesa y el sapo hizo que los espectadores ansiaran visitar Nueva Orleans, pero aún más que eso, nos hizo babear por probar un dulce en particular. El personaje principal, la princesa Tiana, inspirada en la fallecida chef Leah Chase, es una talentosa cocinera que sueña con abrir su propio restaurante y servir sus deliciosos beignets. La película hizo que el público deseara morder uno de estos pequeños buñuelos, parecidos a rosquillas, que son un clásico de Luisiana y suelen servirse con un montón de azúcar en polvo. También inspiró innumerables recetas en Internet.

Desafiamos a cualquiera a que vea la película de 2014 Chef y no se le antoje un Cubano - o, de hecho, anhele salir a la carretera con su propio camión de comida. Es difícil precisar el impacto que tuvo la película en las ventas de este plato, hecho con pan cubano blando y repleto de capas de carne y queso, pero resultó lo bastante tentador como para suscitar muchas recetas para recrearlo en casa. Incluso el guionista, director y protagonista de la película, Jon Favreau, compartió su receta favorita.

La película clásica sobre comida Big Night, protagonizada por Stanley Tucci y Tony Shalhoub como hermanos inmigrantes que luchan por mantener a flote su restaurante de Nueva Jersey, tiene el mérito de haber cambiado la forma en que los estadounidenses ven la comida italiana al revelar todo un mundo más allá de los espaguetis y las albóndigas. La verdadera estrella de la película de 1996 es sin duda el espectacular tímpano. Este plato de pasta horneada en capas, que puede tardar días en hacerse, parece que volvió a los menús de muchos restaurantes gracias a la película.

Los propietarios de restaurantes de Oriente Medio también informaron de un aumento de la gente que pedía baba ganush después de que se estrenara la película de Adam Sandler Zohan: Licencia para peinar en 2008. La comedia no fue precisamente aclamada por la crítica, pero sus numerosas escenas con hummus y esta salsa ahumada a base de berenjena tuvieron un claro impacto en el público.

Este plato árabe levantino -carne adobada que se asa lentamente y se sirve en finas lonchas- no tiene exactamente un papel protagonista en la película de 2012 Los Vengadores, pero bastó una mera mención en la popularísima franquicia para que se beneficiara de ello. Tony Stark (también conocido como Iron Man) menciona el shawarma en la película y también hay una escena de los superhéroes reunidos comiendo la tierna carne después de los créditos (foto). Los restaurantes libaneses de Los Ángeles, EE.UU., informaron de un aumento de las ventas de hasta el 80% tras la película.

Concretamente, el té inglés. La pompa y el glamour de Downton Abbey crearon una sed de todo lo británico, e incluso en China aumentó la popularidad del té de la tarde. En el Reino Unido, una gama de tés de Downton Estate en latas decoradas con imágenes del reparto aprovechó la tendencia, mientras que la English Cream Tea Company informó de que sus ventas habían aumentado un 500% en los pocos años transcurridos desde que se emitió por primera vez la serie de televisión en 2010. También se cree que la popularidad de la serie en EE.UU. provocó nuevas tendencias en las fiestas del té y las teterías.

En la comedia estadounidense Gilmore Girls, emitida por primera vez en 2000, Lorelai y Rory Gilmore, madre e hija, se hicieron famosas por su terrible dieta de hamburguesas con queso, dulces y Pop-Tarts, siendo estos últimos su desayuno preferido. Aunque no hay datos concretos sobre cómo la serie pudo haber impulsado su popularidad, Kellogg's informó de unas ventas en EE.UU. de unos dos mil millones de bolsitas tostadas al año a principios de la década de 2000. Los últimos datos sugieren que los estadounidenses comieron 3.000 millones en 2022.

El queso Wensleydale no solo aparece en la serie Wallace y Gromit de Nick Park, sino que fue salvado por los cortos animados. Las ventas de este queso suave y desmenuzable, producido en North Yorkshire (Inglaterra), habían caído tan drásticamente a principios de los 90 que uno de sus mayores productores de la región, Wensleydale Creamery, cerró. Entonces, en la película de 1995 Wallace y Gromit, Wallace, amante del queso, lo proclamó su favorito de todos, y según se dice, las ventas se multiplicaron por cuatro. La empresa emplea ahora a 200 personas y lleva a los personajes de la serie en una de sus etiquetas.

El efecto Wallace y Gromit se repitió una década después. Solo que, esta vez, el fabricante del queso de pequeña producción Stinking Bishop no estaba tan satisfecho. El largometraje de 2005 Wallace y Gromit: la maldición de las verduras, que menciona el queso de corteza blanca, provocó tal aumento de la demanda que el fabricante, Charles Martell e Hijo, tuvo problemas para satisfacer los pedidos de su fábrica de Gloucestershire, Inglaterra. Hubo informes de gente que compraba las cajas de madera vacías y los quesos se vendían en eBay por hasta $75. 

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Este helado retroclásico era prácticamente desconocido fuera del Reino Unido cuando Muertos de Risa llegó a los cines en 2004. Y los Cornettos solo aparecieron en la película, escrita por Simon Pegg y Edgar Wright, porque eran el remedio favorito de Wright para la resaca. Los helados, en conos de azúcar bañados en chocolate, aparecen en otras dos películas de lo que se conoce en broma como "la Trilogía del Cornetto", que también incluye Arma Fatal y Bienvenidos al fin del mundo. Al parecer, Wall's estaba "muy contento" con la mención.

La película de Pixar Ratatouille (2007) hizo que el público apoyara a una rata suelta en una cocina de París, y nos hizo desear un plato campesino sencillo y a menudo infravalorado. El clásico guiso a base de tomate aparece más allá del nombre de la película de animación, cuando el talentoso cocinero (que resulta ser una rata) Remy sirve su propia versión a un crítico gastronómico esnob. El momento en que Anton Ego le da un bocado -y se ve transportado a su infancia- encierra una reacción con la que seguramente sueñan todos los cocineros.

¿Qué comida sirven en el cielo? Según The Good Place, la respuesta es yogur helado. El yogur helado ocupa un lugar destacado en la serie de TV estadounidense, estrenada en 2016 y protagonizada por Kristen Bell como pecadora confesa que parece ser admitida por error en el más allá "bueno". Donde, obviamente, hay una tienda de yogur helado que sirve infinidad de combinaciones de sabores, desde sorbete de frambuesa hasta langosta de Maine.

Cualquiera que haya visto alguna vez un dibujo animado de Popeye o una de las muchas versiones cinematográficas debe saber una cosa: es "fuerte hasta el final" porque come espinacas. La verdura aparecía en el cómic original, pero fueron los cortos animados producidos por los Estudios Fleischer a partir de 1933 los que realmente dieron fama al marinero y sus compañeros. Según algunas teorías, también ayudaron a salvar la industria de las espinacas durante la Gran Depresión: los cultivadores atribuyeron a Popeye el aumento del consumo de espinacas en un 33% en la década de 1930.

A Las chicas de oro les encantaban las tartas de queso. Según IMDb, las cuatro luchadoras se comieron más de 100 durante la emisión de la serie de TV estadounidense de 1985 a 1992. No se sabe si ver a las chicas acurrucadas ante platos de tarta de queso natural, de chocolate o de doble chocolate tuvo alguna influencia directa en las ventas o en los hábitos alimentarios, pero las ventas de postres de la cadena de restaurantes estadounidense Cheesecake Factory aumentaron espectacularmente durante el mismo periodo.

Kronk era el amante de la comida de la película animada de Disney de 2000 Las locuras del emperador, y creemos que las sabrosas delicias que servía le valieron un papel protagonista en la secuela de 2005, Las locuras del emperador 2: La gran aventura de Kronk. En concreto, estos bocaditos de espinacas que casi quema en una escena y que, en general, le encantan. Podemos entender por qué: la combinación de espinacas tiernas y queso crema envueltos en hojaldre suena bastante deliciosa. Hay numerosas recetas inspiradas en ellos en Internet.

Si alguna vez hubo dudas sobre lo comprometidos que están los fans de la Saga Crepúsculo, el impacto de la serie de películas sobre los raviolis de setas debería disiparlas. Bella pide el plato en su primera cita con Edward en Bella Italia en la primera película, Crepúsculo, estrenada en 2008. La gente acudió entonces en masa al restaurante de Port Angeles, Washington, EE.UU., para recrear aquella fatídica cita. Según los informes, los fans pidieron unos 4.500 cuencos de raviolis en el año siguiente al estreno de la película. El restaurante también puso a la venta una versión lista para comer.

¿Cuántos alimentos pueden protagonizar su propia película? La película de humor "Tomates verdes fritos" teje las historias de sus personajes a través de la comida, en concreto, de una guarnición de tomates verdes fritos rebozados con harina de maíz. Para los espectadores de fuera de EE.UU., la película de 1991 fue quizás la primera vez que oían hablar de tomates verdes fritos. Incluso se ha afirmado que la película fue responsable de convertir el plato en el clásico sureño que se considera hoy en día.

Puede que la trilogía de El Padrino sea más conocida por una "salsa" roja diferente, más macabra y mucho menos apetitosa, pero hay una escena que realmente hizo babear al público y le hizo desear un plato de espaguetis con albóndigas. En la primera película, Peter Clemenza cuenta lo que es más o menos una receta completa de salsa roja italiana o "salsa de los domingos" ¿Su mejor consejo? Añade "un poco de vino y un poco de azúcar" a la burbujeante olla de salsa rica en tomate. La gente sigue hablando de ello -y siguiendo su consejo- hoy en día.

En la segunda temporada de la exitosa serie televisiva El Oso, los comensales del lujoso restaurante Ever comentan que no han tenido tiempo de probar la famosa pizza al plato hondo de Chicago. Richie resuelve el problema yendo a Pequod's Pizza, en Lincoln Park -que suele figurar en las listas como la mejor pizza Deep-dish de Chicago-, y llevándoles una tarta para que la prueben. El chef del restaurante, galardonado con una estrella Michelin, transforma la pizza en elegantes trozos del tamaño de un bocado, con gel de hierbas y microalbahaca. Puede que los puristas de la pizza al plato hondo se hayan horrorizado ante la transformación gourmet, pero Perquod's ha experimentado un aumento de clientes.

Bridgerton celebra la pompa y la pasión de la época de la Regencia, y a menudo se ve a los personajes disfrutando de un suntuoso té de la tarde, con panecillos, los pasteles más bonitos y sándwiches. El té de la tarde es una parte tan importante de la serie que Netflix se asoció con el hotel de cinco estrellas Lanesborough de Londres (Reino Unido) para crear un tentempié adecuado para los fans, que también han organizado sus propios tés de la tarde y fiestas para ver la popular serie.

¿Había oído alguien hablar de los red velvet cupcakes o cupcakes de terciopelo rojo antes de que Carrie y Miranda se las comieran en la tercera temporada de Sexo en Nueva York? Tal vez, pero lo cierto es que aumentó el número de personas que deseaban uno. Magnolia, la pastelería de Nueva York donde las amigas compran sus deliciosos pasteles, informó de "un frenesí" tras el episodio, que no ha cesado. Incluso es una parada en las rutas gastronómicas gracias a su asociación con la serie de TV, e inspiró el lanzamiento de la pastelería británica Hummingbird en 2004.

La serie de Netflix Stranger Things es todo nostalgia y referencias retro, y quizá ninguna sea tan tangible como la obsesión del personaje principal, Eleven, por los gofres Eggo. Interpretada por Millie Bobby Brown, Eleven devora los gofres congelados del desayuno por paquetes, y las ventas del producto de Kellogg's se dispararon. En octubre de 2017, cuando se estrenó la segunda serie, el consumo aumentó un 14% interanual y el producto alcanzó el mayor número de menciones en las redes sociales en un solo mes.

La popularidad de estas golosinas de maní y chocolate está indisolublemente ligada a cierta película sobre un extraterrestre que intenta llegar a casa. En E.T., el extraterrestre, Elliott atrae a la criatura a la casa con un rastro de los coloridos caramelos, resultado de un singular acuerdo de promoción cruzada entre Universal Studios y Hershey Chocolate. Las ventas, que habían estado cayendo, aumentaron un 65% en las semanas siguientes al estreno de la película en 1982. La historia podría haber sido distinta: el director Steven Spielberg se puso primero en contacto con Mars, que al parecer rechazó la oportunidad de que aparecieran M&M's en la película.

¿A quién no se le ha antojado un bocado de delicia turca al ver (o leer) la famosa escena de Edmund y la Reina de las Nieves en Las Crónicas de Narnia: El león, la bruja y el ropero de CS Lewis? Nos gusten o no los dulces y ligeramente jabonosos cubos de confitería, normalmente enterrados en azúcar glas, hay algo en el "efecto Narnia" que nos atrapa siempre. También se traduce en ventas, con informes de subidas de hasta el 200% de las barritas Turkish Delight de Fry's en el Reino Unido en previsión de la versión cinematográfica de 2005.

¿Que coman tarta? No, que coman macarons. Concretamente, los macarons más bonitos, perfectos y de tonos pastel producidos por la legendaria pastelería francesa Ladurée. La película de Sofia Coppola María Antonieta (2006) destacó especialmente por su magnífica estética y por la habilidad de su protagonista, Kirsten Dunst, para dominar la pastelería sin apenas mancharse el maquillaje. La película sobre la Revolución Francesa es un ejemplo legendario de "porno pastelero" y se le atribuye haber hecho mundialmente famosos a estos dulces -y a la pastelería- y haberlos convertido en "la nueva magdalena de América", como ha dicho Dunst: "Hemos vuelto a poner de moda los macarons".

La serie de FX El Oso, sigue la vida del chef Carmen "Carmy" Berzatto (interpretado por Jeremy Allen White), que hereda una tienda de bocadillos tras el inesperado fallecimiento de su hermano Michael. Los espaguetis desempeñan un papel importante en la evolución de la serie, en el dolor de Carmy y, en última instancia, en el final de temporada, dejando a los espectadores desesperados por recrear el plato: una receta sencilla con tomates San Marzano, albahaca, aceite de oliva, escamas de pimiento picante, cebolla y mucha mantequilla. Los "espaguetis del oso " estuvieron entre las 10 recetas más buscadas en Google en 2022.

La tarta de cerezas tuvo un papel protagonista en la serie de culto, que se emitió por primera vez en 1990 y se reestrenó en una tercera temporada en 2017. Y lo que no es menos importante, inyectó la tan necesaria ligereza a un drama que, de otro modo, sería oscuro. El agente Dale Cooper (interpretado por Kyle MacLachlan, en una escena con Sherilyn Fenn) se enamoró de la tarta de cereza que servían en el restaurante ficticio Double R, que se rodó en el Twede's Café (entonces llamado Mar-T Cafe). Desde entonces, el restaurante de la pintoresca North Bend, Washington, EE.UU., ha sido visitado por fans de la tarta de cereza de todo el mundo.

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