Definitivamente no es una moda pasajera: la freidora de aire ha llegado para quedarse. No solo es el aparato de cocina más moderno, rápido, fácil y económico de usar, sino que algunos alimentos saben mejor cocinados en la freidora que de cualquier otra forma. Para ayudarte a sacar el máximo partido a tu máquina, hemos reunido la colección definitiva de recetas para freír con aire, desde patatas fritas hasta beicon.

Haz clic o desplázate por nuestra galería para descubrir cómo una freidora de aire puede hacer que estos 15 alimentos sepan MUCHO mejor.

Adaptado al español por Sara Piquer Martí, Editora en Español para loveFOOD.

Hay una razón por la que todo el mundo habla maravillas de las patatas fritas hechas en el air fryer. Al fin y al cabo ¿por qué recurrir a la fritura -con todos los olores y la suciedad que conlleva- cuando puedes hacer patatas fritas crujientes y sabrosas en una freidora de aire, con muy poco aceite? Incluso si no quieres hacer tus propias patatas fritas desde cero, las congeladas son perfectas para calentarlas en una freidora de aire, sobre todo si cocinas para una o dos personas.

Para un par de raciones, corta dos patatas grandes peladas en rodajas alargadas y remójalas en agua muy fría durante unos 10 minutos (esto eliminará el exceso de almidón para obtener un resultado más crujiente). Escurre y seca bien las patatas fritas, luego calienta la freidora de aire a 160ºC. Reboza las patatas en un poco de aceite y sazónalas con sal marina. Rocía la cesta con un poco de aceite para evitar que se peguen y coloca las patatas fritas en una sola capa. Cocínalas durante 15 minutos, removiéndolas una vez, y luego aumenta la temperatura a 200ºC y cocínalas otros 8 minutos. Las patatas fritas congeladas tardan unos 10 minutos a 200ºC.

Un pollo entero se cocina mucho más rápido en una freidora de aire que en un horno convencional. Y no solo eso, sino que al freír el pollo obtendrás resultados más sabrosos: la piel crujiente y la carne jugosa y tierna. Dependiendo del tamaño de tu freidora de aire, deberías poder utilizarla para asar un pollo de unos 1,5 kg. ¿Nuestro mejor consejo? Coloca un forro para freidora de aire debajo del cajón para recoger los jugos tan deliciosos que suelta el pollo.

Calienta la freidora de aire a 176ºC. Coge el pollo y unta un poco de mantequilla reblandecida en la carne de la pechuga por debajo de la piel, luego sazónalo bien (o añade tu aliño seco favorito). Cocina el pollo con la pechuga hacia arriba durante 30 minutos, luego dale la vuelta y cocínalo durante otros 10 minutos. La parte más gruesa del muslo debe alcanzar los 76 ºC si usas un termómetro de carne cuando esté hecho; si no tienes termómetro de carne, comprueba simplemente que los jugos del mismo pollo sean de un color claro. Deja reposar el pollo 10 minutos antes de trincharlo.

Para conseguir un tofu marinado deliciosamente crujiente, normalmente tendrías que utilizar una freidora (una tarea que acaba siendo bastante más sucia y engorrosa). Sin embargo, con una freidora de aire a mano, tus problemas están resueltos: podrás disfrutar de tu receta vegetariana de una forma mucho más saludable. Antes de empezar a cocinar, tendrás que marinar el tofu durante unos 30 minutos en una mezcla de aceite de sésamo tostado, salsa de soja, ajo y cebolla en polvo, además de un poco de pimentón ahumado.

Calienta la freidora a 200ºC. Saca el tofu de la marinada y pásalo por harina de maíz sazonada con abundante sal marina y pimienta negra. Puedes poner el tofu directamente en la freidora de aire en una sola capa, o ensartarlo en brochetas, lo que facilitará darle la vuelta. Rocíalo con aceite de cocina y cuécelo durante 15 minutos, dándole la vuelta a la mitad. Cuando esté listo, esparce un poco de cebolleta picada y semillas de sésamo, y sírvelo con una salsa de chile.

El queso halloumi hecho con la freidora de aire es un aperitivo estupendo, se cocina muy rápido y son una alternativa deliciosa y original a las patatas fritas clásicas. Además, son mucho más sanas si se hacen en la freidora de aire. Si no te apetece hacerlas tú mismo, venden opciones congeladas que puedes también hacer en el air fryer, pero si quieres prepararlas desde cero, sigue la sencilla receta de la siguiente diapositiva.

Para preparar el halloumi, primero córtalo en bastones. En este punto también puedes marinarlo, si quieres (un adobo de harissa sería una buena opción). Por lo demás, prepara tres cuencos: uno con harina sazonada, otro con huevo batido y otro con pan rallado panko. Calienta la freidora a 180ºC. Pasa los trozos de halloumi primero por la harina, luego por el huevo y, por último, por el pan rallado. Rocíalos con aceite y fríelos durante 8 minutos, dándoles la vuelta a mitad de camino. Sirve las patatas fritas con halloumi acompañadas de tus salsas favoritas.

Las alitas de pollo fritas, cocinadas con el air fryer, son las mejores: tiernas y jugosas por dentro, y tan crujientes por fuera que parecerá que se han frito a la manera tradicional. Además, se cocinan sorprendentemente rápido en la freidora. Si añades un poco de bicarbonato sódico al aliño seco, las alitas quedarán aún más crujientes y, para darles más sabor, prueba a pincelarlas con tu glaseado favorito a mitad de la cocción. Para no tener que fregarlas, pon un forro debajo de la cesta para recoger la grasa mientras se cocinan las alitas.

¿Te gusta? Haz clic en el botón Seguir para ver más historias de loveFOOD.

Calienta la freidora de aire a 200ºC, rocía la cesta con aceite y pon un forro debajo. En la mayoría de las freidoras de aire caben 1 kg aproximado de alitas. Recorta las puntas de las alas y échalas en el aceite. Prepara un aliño seco, añadiendo un poco de bicarbonato sódico; salpimienta y añade las especias secas que prefieras. Sumerge las alitas en el aliño seco, extiéndelas en una sola capa en la freidora de aire (si llenas demasiado la cesta, no quedarán lo bastante crujientes), y cocínalas durante 12 minutos por cada lado. Si necesitan estar más crujientes, añade otros 5 minutos de cocción.

Una gran ventaja de cocinar panceta de cerdo en una freidora de aire es que no hay que limpiar un horno grande después, pero esta no es la única ventaja. Si fríes la panceta en la freidora, obtendrás un chicharrón perfecto y una carne tierna y esponjosa. Además, tanto si la panceta de cerdo es enrollada como plana, tardará menos tiempo en cocinarse en la freidora de aire, con el consiguiente ahorro en la factura de la luz. Una pieza que pese entre 1 y 15 kg cabe en la mayoría de las freidoras de aire. Tanto si lo rellenas con hierbas como si simplemente lo asas con sal marina, tendrás que dejarlo destapado en la nevera durante toda la noche. De este modo, la piel se secará y se obtendrán unos chicharrones muy crujientes.

Los tiempos aquí indicados son para una panceta de cerdo enrollada y atada de 1,5 kg, suficiente para servir hasta cuatro personas. Frota la piel de cerdo con sal marina, luego calienta la freidora de aire a 120ºC; te recomendamos que pongas un forro debajo de la cesta para recoger la grasa. Haz un triángulo con dos trozos de papel de aluminio y envuelve el cerdo de modo que la parte superior y los lados más cortos queden cubiertos, pero no los lados largos. Mete el papel de aluminio por debajo para que no salga volando en la máquina. Cocina durante dos horas, luego retira el papel de aluminio, sube el fuego a 200ºC y cocina otros 15 minutos, o hasta que los chicharrones estén dorados y crujientes. Deja reposar la carne de cerdo y retira los chicharrones, cortándolos en trozos con unas tijeras.

No merece la pena calentar un horno convencional para hacer una patata asada cuando una freidora de aire puede hacer el trabajo en solo 30 minutos. Esta receta es una forma rápida de tener una comida rica en poco tiempo, viene genial si tienes prisa. En la freidora deberían caber cuatro patatas de tamaño decente, así que habrá para todos.

Calienta la freidora de aire a 200ºC. Pincha las patatas por todas partes con un tenedor antes de untarlas con aceite y espolvorear un poco de sal marina. Cuécelas en el microondas a potencia alta durante 5 minutos, pásalas a la freidora de aire y hornéalas durante 25 minutos. Si quieres partirlas y añadirles queso rallado, vuelve a ponerlas en la freidora de aire aún caliente (pero apagada) durante unos minutos para que se derrita el queso. Si dejas la freidora encendida para esta parte, el potente ventilador puede desprender parte del queso y hacer un desastre.

Estos triangulitos de pasta filo -rellenos de diversos rellenos, desde ternera picante hasta patata al curry- suelen freírse. Sin embargo, si los cocinas en una freidora de aire obtendrás los mismos resultados crujientes, sin toda la grasa que conlleva freirlos en aceite (lo mismo ocurre con los rollitos de primavera). Además, si te sobran samosas para llevar, la freidora de aire las recalentará a la perfección, mientras que el microondas las dejará empapadas.

Deberían caber hasta ocho en una cesta normal. Calienta la freidora de aire a 180ºC. Unta las samosas con mantequilla derretida y hornéalas durante cuatro minutos, dándoles la vuelta a la mitad. Sube el fuego a 200ºC y hornea otros dos minutos, hasta que las samosas estén doradas y crujientes. También puedes freír al aire samosas caseras congeladas. Una vez montadas, ábrelas y congélalas en una bandeja antes de transferirlas a un recipiente o bolsa adecuados. Luego, cuando estés listo para cocinarlas, solo tienes que añadir un par de minutos al tiempo de fritura al aire.

Has leído bien: es posible cocinar salchichas en un air fryer. No tendrás que limpiar sartenes ni parrillas después, no necesitarás mucho aceite y estarán listas en solo 10 minutos: crujientes por fuera y blandas por dentro. Asegúrate de poner un forro para freidora de aire debajo de la cesta para recoger la grasa, ya que facilitará mucho la limpieza posterior.

Dependiendo del tamaño de tu freidora de aire, te cabrán entre seis y ocho salchichas. El método es el mismo para todas las salchichas, tanto si cocinas chorizo como simples salchichas de paquete. Calienta la freidora a 200ºC y cocina las salchichas durante 10 minutos, dándoles la vuelta a mitad de cocción (rocía antes la cesta con un poco de aceite para evitar que se peguen).

Una vez que hayas probado las patatas "asadas" en una freidora de aire, nunca volverás al horno. De este modo, usarás mucho menos aceite y tardarás una fracción del tiempo, y acabarás con unas patatas gloriosamente sabrosas, crujientes por fuera y esponjosas por dentro. Además, poner las patatas en la freidora de aire te ayudará a liberar espacio en el horno si estás cocinando a fuego lento un trozo grande de carne. Solo tienes que acordarte de utilizar patatas harinosas (en lugar de cerosas) para obtener el mejor resultado.

La mayoría de las freidoras de aire son lo bastante grandes para meter 1 kg de patatas, lo que debería bastar para alimentar a cuatro personas. Pela y corta las patatas en trozos y cuécelas al vapor durante cinco minutos, sacudiéndolas para que los bordes queden ásperos. Calienta la freidora a 200ºC. Rocía las patatas con 2 cucharadas de aceite para que queden bien cubiertas y espolvoréalas con sal marina. Cocínalas durante 20 minutos, sacudiendo la cesta a mitad de cocción, hasta que las patatas estén doradas por los bordes. ¿Quieres añadir más sabor? Pon unas ramitas de romero y unos dientes de ajo sin pelar.

Si se te antoja una merienda rica y rápida de hacer, esta opción te encantará. Esta receta te permitirá lograr un pan dorado y crujiente con un queso fundido que te hará la boca agua. Es una forma mucho más rica de hacer un sándwich de queso. Una vez que hayas probado nuestro método de la siguiente diapositiva, ¡te resultará imprescindible!

Para que se derrita por igual, utiliza queso ya cortado o ralla el queso que prefieras. Dependiendo de lo que te apetezca, puedes añadir jamón, rodajas de tomate, rodajas de cebolla o un poco de mostaza o chutney. Para una tostada para una persona, utiliza 57 g de queso, dos rebanadas de pan y una nuez de mantequilla blanda. Unta el pan con la mantequilla, añade el queso, presiona las dos rebanadas para sellarlas y unta la parte exterior del pan con mantequilla. Calienta la freidora a 200ºC y fríe durante 10 minutos, dándoles la vuelta a la mitad.

El ajo asado es deliciosamente dulce, muy distinto del ajo crudo, que es acre y picante. Queda muy rico si lo mezclas con puré de patatas o lo añades a sopas y purés. Pero ¿por qué calentar un horno grande para cocinar un par de gajos cuando puedes usar una freidora de aire? Conseguirás el mismo sabor caramelizado ensuciando mucho menos.

Para "asar" el ajo en la freidora de aire, corta la parte superior de un bulbo entero y deséchalo. Envuelve el bulbo de ajo en papel de aluminio, añade un chorrito de aceite de oliva y sella la parte superior. Calienta la freidora a 180ºC y cocina durante 40 minutos hasta que el ajo esté blando y tierno.

Cuando el maíz dulce se pone en una freidora de aire caliente, un aliño de aceite de oliva se combina con los azúcares naturales del maíz y se carameliza, dando como resultado un exterior deliciosamente carbonizado y unos granos dulces y tiernos. Esta receta es perfecta para los días en que no te apetece encender la barbacoa o ponerte delante de una plancha. Deberían caber cuatro mazorcas enteras de maíz en la freidora de aire, listas para añadir tus mantequillas aromatizadas favoritas, o tal vez un poco de queso blando y hierbas.

Primero, calienta la freidora de aire a 200ºC. Saca las mazorcas de maíz de sus hojas, úntalas con aceite de oliva y añade una buena pizca de sal marina. Cocínalo durante 15 minutos, dándole la vuelta una vez. Cuando esté listo, el maíz debe estar magníficamente carbonizado, pero tierno al mismo tiempo.

Perfectos para ensaladas y sopas, los picatostes aportan un toque de textura a los platos, y son una forma estupenda de aprovechar el pan un poco duro. Pero si sólo vas a cocinar para una o dos personas, ¿para qué te vas a molestar en calentar un horno convencional cuando puedes cocinarlos en la freidora de aire en cuatro minutos? Además, no hay posibilidad de que se quemen una vez que hayas programado el temporizador.

El pan de masa madre ligeramente rancio hace los mejores picatostes. Utiliza 1 cucharada de aceite de oliva por cada rebanada de masa madre. Corta el pan en dados y mézclalos con aceite y sal marina (para unos picatostes perfectos para la ensalada César, añade también un poco de parmesano rallado). Calienta la máquina a 200ºC y fríe el pan en una sola capa durante cuatro minutos, sacudiendo la cesta a mitad de camino para que los picatostes se cocinen uniformemente.

Si hay un ingrediente del que los fans de las freidoras de aire no pueden dejar de hablar, es el beicon, y es fácil ver por qué. Magníficamente crujiente en los bordes y masticable en el interior, el bacon frito puede ser el mejor que hayas probado nunca. Además, aparte de sus credenciales gustativas, no hay grasas añadidas, no hay que freír ni asar, y hay que limpiar menos después.

Coloca un forro debajo de la cesta para recoger la grasa y calienta la freidora de aire a 180ºC. Pon el beicon en la freidora de aire en una sola capa y cuécelo durante seis minutos, dándole la vuelta a mitad de cocción. También puedes cocinar lardones de tocino a la misma temperatura, cocinándolos durante cuatro minutos y dándoles la vuelta a mitad de camino. 

¿Te ha gustado? Haz clic en el botón de Seguir arriba para ver más historias fantásticas de loveFOOD.