Después de un largo día, lo último que quieres es pasarte horas en la cocina. Desde sencillos platos de pasta y rápidos salteados hasta ensaladas y sopas que cocinarás sin esfuerzo, hemos reunido una lista de brillantes ideas de recetas rápidas de hacer: las tendrás listas en 20 minutos o menos.

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Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveFOOD.

Un bote de salsa teriyaki comprada en el supermercado es la clave para preparar este sabroso plato en menos de 20 minutos. Para dos personas, corta filetes de muslo de pollo de 400 gramos en trozos de 2,5 cm y pásalos ligeramente por harina de maíz. Pon una sartén con un poco de aceite vegetal a fuego fuerte, vierte los trozos de pollo y cocínalos durante 5 minutos, dándoles la vuelta una vez, hasta que el pollo esté bien hecho. Añade 6 cucharadas de salsa teriyaki y baja el fuego. Cocina a fuego lento hasta que la salsa espese. Sírvelo salpicado de semillas de sésamo y cebolleta, con arroz blanco esponjoso y verduras al vapor aparte.

El cordero y el queso feta forman una perfecta combinación que funciona estupendamente como base de esta cena rápida. Simplemente cocina las chuletas de cordero bajo el grill durante unos cinco minutos.

Querrás que estén crujientes por fuera, pero rosadas y jugosas por dentro. Colócalas en una fuente y espolvoréalas con cantidades generosas de queso feta, sazónalas con abundante pimienta negra y sírvelas con rodajas de limón y panecillos calientes.

Este sensacional plato parece propio de un restaurante, pero en realidad es muy fácil de preparar, perfecto para una cena sencilla pero especial el viernes por la noche.

Sofríe los filetes de cuadril en una sartén antiadherente hasta que estén a tu gusto. Mientras los filetes reposan, aliña puñados generosos de hojas de rúcula con zumo de limón, un chorrito de aceite de oliva virgen extra y abundante pimienta negra. Dispón las hojas en platos de servir, luego corta los filetes reposados en tiras y colócalas encima. Decora con virutas de parmesano, rocía con sirope de balsámico y sirve.

A todo el mundo le encantan las tostadas de aguacate para el brunch, y son igual de deliciosas para la cena. Tritura los aguacates y añade los ingredientes que desees: guindillas picadas, cebolletas cortadas en rodajas finas y tomates cortados en dados. Sazona con sal y pimienta y un buen chorro de zumo de limón. Extiéndelo sobre panecillos tostados y añade un huevo escalfado o frito para terminar. También puedes cubrir la tostada con crujiente halloumi a la parrilla, trocitos de tocino o jamón, o tiras de salmón ahumado.

Si quieres una cena sabrosa y sustanciosa, completamente vegana, no busques más. Para preparar dos raciones de tofu crujiente, corta unos 340 gramos de tofu en dados y sécalos. Espolvoréalo con un poco de harina de maíz y remuévelo para cubrirlo. Pon una sartén con un chorrito de aceite de sésamo a fuego medio-alto y fríe el tofu durante cuatro minutos por cada lado, hasta que esté crujiente. Añade cuatro cebolletas cortadas en rodajas finas, una guindilla roja cortada en rodajas finas y los ramilletes de una cabeza pequeña de brécol. Cocina durante tres o cuatro minutos más. Mientras tanto, mezcla 1 cucharada de aceite de sésamo y otra de salsa de soja, dos dientes de ajo finamente picados y un poco de jengibre fresco rallado. Sirve el tofu en capas sobre arroz cocido o fideos, rociado generosamente con el aliño.

Unos tiernos filetes de salmón o bacalao cubiertos con una costra de hierbas y queso constituyen una deliciosa y ligera comida entre semana. Para cuatro personas, coloca cuatro filetes delgados de pescado en una fuente de horno y sazónalos bien. Mezcla 4 onzas de pan rallado (unos 113,4 gramos), un diente de ajo machacado, 3 cucharadas de parmesano finamente rallado, 4 cucharadas de perejil finamente picado y un poco de ralladura de limón. Presiona la mezcla de pan rallado sobre la superficie superior del pescado. Ponlo en el horno precalentado a 220°C/200°C y cuécelo durante 15 minutos, hasta que el pan rallado esté dorado y el pescado bien hecho. Sírvelo con patatas cocidas o patatas fritas al horno y una ensalada verde.

Unos saludables filetes de salmón glaseados con salsa de soja y servidos con patatas cocidas y una ensalada verde constituyen una comida rápida y realmente sabrosa. Para hacer suficiente glaseado para cuatro filetes de salmón, bate 4 cucharadas de salsa de soja, 2 cucharadas de miel líquida y 1 cucharada de aceite de sésamo. Unta el pescado con el glaseado, sazónalo generosamente y cocínalo a la parrilla caliente de 5 a 8 minutos (según el tamaño de los filetes), hasta que el pescado esté cocido y el glaseado chisporrotee.

Este clásico plato taiwanés es genial para una comida rápida y ágil. Para preparar una cantidad suficiente para dos personas, pon dos pechugas de pollo cortadas en dados en un cuenco y espolvoréalas ligeramente con sal, pimienta y harina de maíz. Pon un wok o una sartén con un poco de aceite vegetal a fuego fuerte, añade un puñadito de jengibre cortado en rodajas finas y un par de dientes de ajo machacados y fríelos hasta que estén crujientes. Añade una guindilla roja cortada y, a continuación, los trozos de pollo. Vierte un chorrito de vino de arroz y cuece durante dos o tres minutos, luego añade 3 cucharadas de aceite de sésamo tostado y salsa de soja ligera, y 1 cucharadita de azúcar. Cocina durante cinco minutos, hasta que la salsa se haya reducido y el pollo esté bien hecho. Esparce las hojas de albahaca tailandesa para servir.

Las recetas de cerdo char siu suelen requerir cerdo asado a fuego lento, pero este salteado puede estar listo en menos de 20 minutos. Para dos personas, mezcla unos 255 gramos de filete de cerdo cortado en lonchas finas con una cucharadita de salsa de soja, otra de salsa hoisin, otra de miel líquida y una pizca de pimienta blanca. Una vez que el cerdo esté cubierto con la salsa, espolvoréalo ligeramente con harina de maíz y resérvalo. En un bol aparte, bate 3 cucharadas de agua, 1 cucharada de salsa de soja ligera, 1 cucharadita de salsa hoisin y 1 cucharadita de pasta de miso.

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Calienta una sartén o un wok hasta que esté bien caliente. Añade un chorrito de aceite de colza, seguido de dos dientes de ajo machacados. Echa el cerdo en la sartén, déjalo 10 segundos para que se dore y dale la vuelta. Añade un chorrito de vino de arroz, remueve durante otros 10 segundos más o menos, luego añade las hojas de una cabeza de pak choy, un puñado de ramitos de brécol, un pimiento rojo o amarillo cortado en rodajas finas y un chorrito de agua. Mezcla durante tres o cuatro minutos, vierte la salsa y vuelve a mezclar. Sírvelo enseguida.

Una lección de deliciosa sencillez, para hacer cacio e pepe para dos, cuece 200 gramos de espaguetis o linguini hasta que estén al dente, escúrrelos bien y reserva el agua de cocción de la pasta. Vuelve a poner la sartén al fuego con un buen puñado de mantequilla. Una vez derretida, espolvorea 1 cucharadita de pimienta negra recién molida. Cocina durante un minuto más o menos, hasta que desprenda aroma, luego vierte un cucharón de agua de cocción de la pasta y llévala a ebullición. Vuelca la pasta en la sartén, junto con un buen puñado de parmesano rallado. Remueve bien y añade un poco más de parmesano rallado, removiendo la pasta hasta que quede una salsa suave y sedosa. Sírvese inmediatamente.

Este sabroso plato está inspirado en el tradicional nasi goreng (arroz frito indonesio) y es perfecto para aprovechar las sobras de pollo asado. Para cuatro personas, cuece 400 gramos de arroz basmati integral siguiendo las instrucciones del paquete. Añade cuatro huevos batidos a una sartén antiadherente caliente, pasándolos por la sartén para cubrirlos bien. Cocínalos durante un minuto más o menos por cada lado, luego enróllalos en forma de tortilla y córtalos en rodajas. A continuación, corta una cebolla en rodajas finas y pon la mitad en una batidora con tres dientes de ajo, una guindilla roja picada, 2 cucharadas de salsa de soja, 1 cucharada de azúcar moreno y 1 cucharada de puré de tomate. Tritura bien hasta obtener una pasta.

Pon una sartén con un poco de aceite vegetal a fuego fuerte. Añade el resto de la cebolla y sofríela durante dos o tres minutos, hasta que se ablande. Añade unos 255 gramos de restos de pollo asado y la pasta de cebolla y guindilla. Cuécelo un par de minutos, añade el arroz cocido y sofríelo de tres a cuatro minutos más, hasta que se caliente del todo. Añade un par de cebolletas picadas y un puñado de cilantro picado. Reparte en cuencos y cubre con la tortilla cortada, esparciendo unos cacahuetes salados y más cebolletas cortadas para terminar.

Para una comida increíblemente deliciosa, cocina tu filete favorito hasta que esté a tu gusto. Déjalo reposar y, a continuación, cubre el filete con una generosa pizca de mantequilla de ajo y hierbas y pásalo brevemente por la parrilla (utiliza mantequilla de ajo comprada en el súper o hazla tú mismo/a batiendo ajo machacado y perejil finamente picado en mantequilla ablandada). Sírvelo con patatas fritas al horno.

Un plato híbrido sensacional, la clásica combinación de huevos, beicon y espaguetis se hace aún más deliciosa gracias a la adición de ingredientes de influencia tailandesa. Para cuatro comensales, bate 2,5 cucharadas de salsa de soja, 1 cucharada de pasta líquida de soja, 1,5 cucharadas de salsa de soja baja en sodio y 1,5 cucharaditas de salsa de pescado. Pon un wok o una sartén a fuego fuerte, añade tres tiras de tocino cortado grueso y cocínalo de 6 a 7 minutos, hasta que esté ligeramente crujiente. Añade cuatro dientes de ajo machacados y una pizca de guindilla en polvo y cocina un minuto más.

Sube el fuego a alto, añade la salsa que has hecho antes y cocina durante un minuto más o menos hasta que se reduzca. Añade los ramilletes de una cabeza pequeña de brécol y 60 ml de caldo de pollo y cuece durante 4 minutos, hasta que estén tiernos. Echa 225 g de espaguetis cocidos en la sartén junto con 60 ml más de salsa. Cocina de 3 a 5 minutos, removiendo con frecuencia, hasta que la salsa esté bien caliente. Retira la sartén del fuego, añade dos huevos batidos y remueve hasta que quede cremoso. Sírvelo adornado con cebolleta picada.

La pasta al pesto es un clásico de las cenas rápidas, pero ¿por qué no darle un toque nuevo a esta salsa? Para preparar una ración individual de pasta al pesto de espinacas, cuece tu pasta favorita hasta que esté al dente (en este caso, apostamos por las orecchiette), escúrrela y reserva un poco del agua de cocción. Descongela tres bloques de espinacas congeladas en una sartén seca a fuego medio. Cuando estén casi descongeladas, añade un chorrito de aceite de oliva y dos dientes de ajo laminados. Sofríe durante unos minutos, añade un chorrito de nata líquida y cuece a fuego lento durante un minuto más o menos. Incorpora la pasta cocida a la salsa, añadiendo un chorrito del agua de cocción reservada. Esparce el parmesano rallado para servir.

Para animar el arroz que sobró el día antes, pon un wok o una sartén con un poco de aceite vegetal a fuego medio. Casca uno o dos huevos. Cuando estén medio cocidos, rompe las yemas y corta las claras con una espátula. Aparta el huevo de la sartén, sube el fuego y añade el arroz cocido, mezclándolo bien para evitar que se formen grumos. Añade los guisantes y la col cortada en rodajas finas y sazona con salsa de soja y aceite de sésamo. Puedes añadir aquí cualquier ingrediente adicional que tengas a mano: pollo desmenuzado, tofu crujiente, cintas de zanahoria. Cuando todo esté bien caliente, repártelo en cuencos y sírvelo.

Este increíblemente sabroso y fácil ramen utiliza como estrella los fideos instantáneos y puede estar listo en solo 10 minutos. Para un plato abundante para una persona, cuece los fideos ramen con miso según las instrucciones del paquete, añadiendo a la sartén un puñado de guisantes (o alguna verdura que tengas escondida en la nevera o el congelador). Mientras tanto, escalfa, hierve o fríe un huevo hasta que esté hecho a tu gusto. Vierte los fideos y el caldo de cocción en un cuenco y adórnalo con guindilla en rodajas, cebolleta, tofu en dados y semillas de sésamo. Añade el huevo y sírvelo.

Una ensalada aparentemente sencilla, pero es el aliño de cacahuete lo que hace que este plato esté realmente delicioso. Para cuatro personas, mezcla 1 cucharada de aceite de cacahuete, 2 cucharadas de mantequilla de cacahuete (suave o crujiente, tú decides), 1 cucharada de salsa de pescado y un buen chorro de zumo de lima. Trocea las hojas de un cogollo de lechuga arrepollada y colócalas en una fuente. Hierve seis huevos y, una vez fríos, pélalos, córtalos en rodajas y añádelos a la fuente. Rocíalos con el aliño, dándoles la vuelta para cubrirlos.

Nos gusta hacer este plato con farfalle, pero puedes utilizar la pasta que tengas a mano. Para cuatro personas, calienta suavemente 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra y 2 cucharadas de mantequilla en una sartén. Sube el fuego a medio, añade una cebolla picada finamente y cuatro lonchas de panceta o tocino picadas finas. Cocina durante tres o cuatro minutos, luego añade cuatro puñados grandes de guisantes congelados, unos 180 ml de caldo de verduras caliente y un puñado de parmesano rallado. Tápalo y cuécelo durante cuatro minutos más. Incorpora la pasta cocida a la salsa, mezclándola bien. Sirve el plato con más parmesano.

Este salteado, crujiente y fresco, es la comida vegana más deliciosa que puedes preparar en una sola cazuela. Para hacer suficiente para cuatro, bate 1 cucharada de salsa de soja y 1 cucharada de vinagre de arroz, y añade 2 cucharadas de aceite de sésamo, 5 cucharadas de mantequilla de cacahuete y 2 cucharadas de agua. Pon un wok con un chorrito de aceite de girasol a fuego medio. Añade dos dientes de ajo cortados en láminas finas y 300 gramos de brócoli y guisantes tiernos. Cocínalos durante dos o tres minutos y, a continuación, añade 310 gramos de fideos udon directos al wok. Al cabo de un minuto, vierte la salsa, remueve bien para cubrirlos y cocina durante un minuto más o menos, hasta que la salsa espese ligeramente.

No hay nada más reconfortante que un bocadillo de queso fundido, y este es especialmente delicioso. Para hacer cuatro bocadillos, fríe un pimiento verde picado fino y media cebolla roja picada fina en un poco de mantequilla hasta que se ablanden. Viértelo en un cuenco y añade unos 85 gramos de queso cheddar suave y 170 gramos de mozzarella desmenuzada y una pizca de guindilla en polvo. Unta con mantequilla cuatro rebanadas de pan grueso y pon encima la mezcla de quesos. Cubre cada una con otra rebanada de pan para hacer cuatro sándwiches. Pon una sartén con un poco de mantequilla a fuego medio y cocina los bocadillos, por tandas si es necesario, durante dos o tres minutos por cada lado, hasta que el pan esté tostado y el relleno, derretido.

Esta reinvención de un clásico italiano te salvará cualquier cena entre semana. Para preparar suficiente pollo a la parmesana para cuatro personas, pon una sartén con un chorrito de aceite de oliva a fuego fuerte. Añade unos 500 gramos de filetes de pechuga de pollo y cocínalos entre tres y cuatro minutos, hasta que se doren por todos lados y estén bien hechos. Añade una pizca de orégano seco y tomillo, vierte 300 ml de passata en la sartén y sazona. Añade 340 gramos de espaguetis de calabacín y caliéntalos. Mezcla 85 gramos de mozzarella rallada, parmesano rallado y pan rallado. Espárcelo por encima del pollo y ásalo entre 4 y 5 minutos, hasta que esté dorado y burbujeante.

Brillantes para el desayuno, el almuerzo, la comida y la cena, los buñuelos de maíz hacen, de una lata de maíz, una comida sabrosa y sustanciosa. Para dos personas, mezcla una cebolla picada finamente, 6 cucharadas de harina de trigo, una pizca de pimienta de cayena o guindilla en polvo y 300 gramos de maíz dulce en lata escurrido. Sazona y remueve para mezclar. Añade dos huevos y 2 cucharadas de leche, mezclando bien para formar una masa gruesa. Pon una sartén con un buen chorro de aceite de oliva a fuego medio. Añade cucharadas de la masa a la sartén y cocina de tres a cuatro minutos por cada lado, hasta que se doren. Sírvelas con los ingredientes que prefieras: aguacate triturado y beicon crujiente, huevos escalfados y salmón ahumado, nata agria y cebolleta.

Si siempre tienes una bolsa de gambas en el congelador, tendrás esta comida rápida lista en cuestión de minutos. Sofríe puerros en mantequilla hasta que se ablanden, luego añade tomates, ajo, gambas congeladas descongeladas y una pizca de guindilla. Echa la pasta cocida (puedes incluso utilizar pasta fresca comprada) y la cena estará lista.

Para algo delicioso, prepara espaguetis con cangrejo. Para cuatro personas, fríe una guindilla roja picada y un par de dientes de ajo machacados en aceite de oliva hasta que se ablanden. Añade unos 80 gramos de carne de cangrejo marrón y 300 ml de caldo de pescado y llévalo a ebullición. Reduce el fuego y cuece a fuego lento, sin tapar, entre 5 y 10 minutos, hasta que espese. Cuece 400 gramos de espaguetis según las instrucciones del paquete, reservando un poco del agua de cocción. Añade la pasta a la salsa, mezclándola bien. Si te parece demasiado espesa, añade un poco del agua reservada. Sazona con sal, pimienta y ralladura de limón. Reparte en cuencos y termina con un poco de carne de cangrejo blanco.

Esta maravilla, una versión sencilla de la bullabesa clásica, te transportará a la Riviera francesa en una noche entre semana y estará lista en 15 minutos. Para dos personas, cocina una cebolla finamente picada en un poco de aceite de oliva hasta que se ablande (unos cinco minutos), luego añade una pizca de azafrán, un diente de ajo machacado y dos hojas de laurel. Cuécelo durante un minuto más o menos y, a continuación, añade una lata de 230 gramos de tomates picados y 500 ml de caldo de pescado. Llévalo a ebullición y añade 200 gramos de marisco variado (calamares, mejillones, gambas) y un filete de bacalao cortado en dados y sin piel. Cocina a fuego lento entre 5 y 10 minutos, hasta que las gambas se hayan vuelto rosadas y el marisco esté bien cocido. Reparte en cuencos y adorna con perejil picado para servir.

Este plato tiene un sabor realmente épico y puedes tenerlo listo en menos tiempo del que tardarías en pedir comida para llevar. Para cuatro personas, pon una sartén grande con un poco de aceite vegetal a fuego medio. Saca la carne de seis salchichas de cerdo de la piel y échala en la sartén. Espolvorea con un toque de polvo de cinco especias y cocina durante cinco minutos, removiendo de vez en cuando. Mientras tanto, prepara la salsa dan dan: bate 2 cucharadas de tahini, salsa de soja oscura, aceite frío y agua caliente. Añade dos paquetes de 280 gramos de fideos udon a la sartén, seguidos de la salsa y las hojas de una cabeza de pak choi. Mezcla muy bien y saltea un minuto más antes de servir.

Esta variante de la shakshuka tradicional rebosa sabor, textura, color y bondad. Para servir a dos personas, fríe 400 gramos de espárragos cortados en una sartén hasta que estén ligeramente carbonizados (unos tres minutos). Retira los espárragos de la sartén, baja el fuego y añade un puñado de cebolletas picadas, dos dientes de ajo machacados y unas semillas de comino. Cocina durante un minuto más o menos, luego añade media col rallada y cocina durante tres minutos más. Añade un chorrito de zumo de limón, un puñado de queso feta desmenuzado y los espárragos. Baja el fuego y echa cuatro huevos. Cúbrelos con una tapa y cuécelos entre 5 y 7 minutos, hasta que las claras estén cuajadas pero las yemas aún blandas. Sírvelos salpicados con más queso feta.

Ideal para una tarde de verano, esta ensalada Niçoise es fresca, sabrosa y muy gratificante. Solo tienes que cortar las patatas cocidas en cuartos y colocarlas en un cuenco. Añade judías verdes escaldadas, huevos cocidos en rodajas, aceitunas Kalamata, tomates maduros cortados por la mitad, rábanos y pepino en rodajas y atún en lata escurrido. Añade hojas de lechuga baby gem rotas, rocíalas con un aliño de ensalada de miel y mostaza y remueve suavemente para mezclar.

Una opción para cuando parece que no hay comida en casa y necesitas un plato reconfortante y satisfactorio. Para preparar una cantidad suficiente para una persona, vierte unos 75 g de macarrones en una taza y cúbrelos con 250 ml de agua. Tápalo con film transparente y perfora la superficie varias veces. Coloca la taza en un bol o una jarra y cuece a máxima potencia en el microondas durante dos minutos. Remueve bien, deja reposar un minuto y repite este proceso dos veces más, hasta que la pasta esté cocida. Añade mantequilla, Marmite y Cheddar fuerte al gusto, cuece un minuto más, remueve bien y sirve.

El pescado al horno con verduras es uno de los platos favoritos de las cenas sanas. La técnica de cocción del papillot favorece que el pescado se cocine al vapor y conserve mucha humedad. Para hacerlo, coloca filetes de pescado firme (bacalao, salmón o fletán) en cuadrados individuales de papel de horno. Añade los condimentos que prefieras: hinojo y limón en rodajas, tomates, alcaparras y aceitunas negras. Rocía con aceite de oliva, sazona y envuelve para formar un paquete. Hornea a 200°C/180°C durante 12-15 minutos, o hasta que el pescado esté bien cocido.

Esta comida rápida y fácil es maravillosamente sabrosa. Para dos personas, bate cuatro huevos con dos guindillas verdes picadas, dos cebolletas picadas y un tomate grande picado fino. Añade un puñado de cilantro picado y sazona con abundante pimienta negra. Calienta un poco de mantequilla en una sartén antiadherente a fuego medio. Añade la mitad de la mezcla de huevo y cuécela durante uno o dos minutos, antes de darle la vuelta suavemente para que se haga del todo. Retíralos de la sartén y repite la operación con el resto de la mezcla. Coloca las tortillas dobladas entre rebanadas de pan blanco untado con mantequilla, añadiendo kétchup de tomate (si lo deseas).

Este rápido salteado aprovecha al máximo los ingredientes de preparación rápida para hacer una cena realmente sabrosa. Para dos personas, pon un wok con un chorrito de aceite de colza a fuego fuerte. Sofríe dos dientes de ajo cortados en láminas finas y una guindilla roja picada hasta que desprendan aroma, luego añade cinco puñados grandes de setas ostra, las hojas de una cabeza de pak choy y un chorrito de vino de arroz. Añade 3 cucharadas de salsa de Sichuan (o más al gusto) y lleva a ebullición. Añade unos 300 gramos de fideos listos para el wok, remueve hasta que los fideos queden cubiertos por la salsa y bien cocidos, y sirve.

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